lunes, 8 de diciembre de 2008

Los cuentos de Pirandello a escena

Luigi Pirandello (Agrigento, 1867 - Roma, 1936) está considerado como uno de los más grandes dramaturgos del siglo XX. La publicación en 1921 de Seis personajes en busca de autor le hizo mundialmente conocido. En 1934, obtuvo el Premio Nobel de Literatura. Asimismo, es autor de novelas, poesía y libros de relatos.

Su gran proyecto literario de madurez fue un libro al que tituló Cuentos por un año. Su intención era la de ofrecer una obra con 365 narraciones, una por cada día del año. Su muerte le impidió completar el proyecto, pero llegó a reunir 241.

En su narrativa breve, el autor siciliano fue alejándose del realismo y adoptando posiciones más cercanas al humorismo y la fantasía para expresar sus ideas. Se trata de una visión paralela a la de su dramaturgia, en la que la ilusión, el absurdo de la existencia humana o la imposibilidad de conocer la verdad son rasgos característicos. Una visión que sorprende por la riqueza de sus registros y que transita tanto por el verismo, como por la fábula filosófica, la fantasía absurda o la crónica de costumbres.

No hay plan estricto en los Cuentos para un año. No hay tampoco un hablante único, sólo una sucesión fortuita de penas y alegrías diarias. Son trozos de vida, “pequeños espejos” unidos simplemente por el desorden del transcurrir del tiempo. Y cuando hay humorismo, no es gracioso ni divertido, sino irremediablemente trágico. No en vano, para este genial dramaturgo italiano, “todos vivimos vidas que no queremos vivir, y andamos deambulando por la tierra en busca de un autor que pueda darnos otra vida mejor”.

“Tantas voces…” es un espectáculo conformado por algunas de esas vidas nacidas en los cuentos y en las piezas teatrales de Pirandello. Se trata de una selección de las obras más conocidas y apreciadas por la crítica literaria: Tengo tantas cosas que contarle…; La casa de Granella; El hombre de la flor en la boca; Limones de Sicilia; El certificado; y Alguien ha muerto en el hotel.

Casi cuarenta personajes, interpretados por siete versátiles actores, que conforman un mosaico de la Italia de principios del siglo XX en el que aparecen la Roma burguesa y artística, el Palermo portuario y céntrico, la Sicilia rural del interior, las cerradas capitales de provincia, estaciones de tren, hoteles, calles ruidosas, la soledad de las habitaciones, las mansiones vacías del campo, la música popular, los objetos, el teclado de un piano, el silencio…, la vida, los días… Eso es “Tantas voces…”, un mundo paradójicamente fragmentado y compacto, donde tienen cabida un enamorado viejo y vulgar, una viuda pretenciosa, un huésped de hotel reflexivo y filosófico, un chismoso clasista, un director de orquesta, un recepcionista de hotel, una anciana enlutada, una gobernanta, un hombre enfermo, un arrendatario egoísta, una familia provinciana, un espíritu, un juez obsesionado, un hombre gafe, un músico de una banda municipal, una cantante de ópera, campesinos… Voces, voces…, tantas voces…

Juan C. Plaza-Asperilla.